En este módulo abordaremos la idea de totalidad contenida en el poema, nos acercaremos a otra forma de entender el objeto artístico desde la modelación del lenguaje y escarbaremos en nuestro interior para darle vida nueva a objetos de nuestro pasado. La poesía como frontera y como destino nos empuja a convertirnos en arqueólogos de nuestra propia historia, en profanadores de ruinas que nos devuelvan la propiedad del mundo. La idea de lo banal como posibilidad será el punto de partida de esta primera exploración, en la que también abordaremos el concepto de “escritura peligrosa” durante la charla virtual del sábado.
Curaduría sobre autores varios
Francis Ponge
Alexandre M. Jacob
Derek Baileau
Empecemos con dos ejercicios sobre “escritura peligrosa”. El primero es escribir acerca de un momento después del cual no volviste a ser el mismo. El segundo es escribir sobre un evento que no recuerdas muy bien. Estos dos ejercicios permiten sumergirse en las experiencias propias y construir a partir de ellas.
Es importante hablar de otro aspecto sobre estos dos ejercicios. Aunque la tarea es escribir una historia personal, tienes permiso para mentir. Si estás escribiendo sobre un momento después del cual no fuiste el mismo y no te acuerdas de todos los detalles, entonces miente.
La escritura peligrosa manipula, crea tensión y drama cuando en la “vida real” no hay ni drama ni tensión. La escritura peligrosa distorsiona la verdad. La dice mal, la dice raro, la dice al revés. Arranca las pantallas y los velos a través de los que todos vivimos. Mezcla lo universal con lo ordinario. Pero más que nada, la escritura peligrosa miente.
Y miente y miente y miente.
Coqueteando con el peligro
Pasemos al ejercicio.
Paso uno
Conecta tu vivencia o recuerdo con un objeto que tenga un especial significado para ti, ya sea porque representa un episodio doloroso o un final. Mira ese objeto. Siéntelo. No lo analices. Deja que el dolor o el amor o lo que haya sido, te sacuda.
Paso dos
Con el recuerdo vivo, pon en un cronómetro 10 minutos y empieza a escribir sobre ese objeto. ¡Sin pensar! Escribe todo lo que puedas de él.
Paso tres
No te detengas en la veracidad de los hechos. Si no estás seguro de algo, si no te acuerdas bien, no te pares a forzar la idea e invéntalo todo. Si a ti te duele un montón pero piensas que al decirlo no transmite la fuerza de lo que sientes, exagéralo, ínflalo, píntalo hasta que retrate el nivel verdadero de lo que sientes. Altera la trama. Métele más tensión. Usa todo los recursos para que con tus mentiras alcancen el nivel emocional de tu recuerdo.
Paso cuatro
Métele mano. Edita. Corta. Pega. Exagera más sobre ese objeto, si quieres. Dale el tono que quieras; vuélvelo fantástico, de ciencia ficción o costumbrista, no importa, solo asegúrate de que el conflicto emocional, tu visión original, siga ahí: más clara y fuerte que nunca.
Compártelo
Envía el resultado a la dirección que definiremos en el encuentro virtual del sábado.
Nada es original. Roba de donde sea que encuentres inspiración o alimente tu imaginación. Devora viejas películas, nuevas películas, música, libros, pinturas, fotografías, poemas, sueños, afiches callejeros, árboles, nubes, agua, luz y sombras. Roba solamente aquellas cosas que le hablen directo a tu corazón. Si haces esto, tu trabajo (y tu robo) será auténtico.
La autenticidad es invalorable; la originalidad no existe. Y no te preocupes en ocultar tu robo. Celébralo si te gusta!. En todo caso, siempre recuerda lo que Jean–Luc Godard decía: «No es de dónde tomamos las cosas. Lo que importa es hacia dónde las llevamos»
Jim Jarmush
En las dinámicas de creación de artefactos poéticos se enmarca, como caso particular, la técnica apropiacionista, la cual se diferencia de las prácticas de creación habituales, es decir de las llevadas por eso que comúnmente llamamos «inspiración», en que es autoconsciente: pretendidamente, no oculta sus materiales de construcción y de uso, sus referentes de inspiración no solo están a la vista sino que son en sí mismos la obra o parte de la obra.
En este nuevo módulo ahondaremos en uno de los recursos más poderosos al momento de experimentar con el lenguaje y sus posibilidades: el apropiacionismo.
Sobre el poema
Eloy Fernández Porta
Curaduría sobre autores varios
Imágenes propuestas:
El ejercicio para esta semana juega con la posibilidad de elaborar dispositivos poéticos a partir de la asociación libre, pero también de la apropiación de otros lenguajes. La idea es escribir un dispositivo poético que involucre las siguientes recomendaciones:
1- El título del texto será: Es la sombra lo que por la noche resucita.
2- Debe incorporar en su contenido las dos imágenes propuestas.
3- Deben intentar darle una velocidad a la historia (para esta ocasión la velocidad será la de una bombilla a punto de fundirse).
4- Que se diviertan.
johngalindoc@gmail.com
El porvenir del texto literario es híbrido y las ideas desarrolladas en esta nuevo módulo mostrarán que, en la poesía mutante, la hibridación no supone la preeminencia de un medio sobre otro, sino la iniciación de una dinámica creativa que genera la interacción entre los distintos medios de difusión y modos de expresión. En vez de imponerse sobre las demás formas de expresión artística, las estructuras poéticas híbridas fomentan el diálogo entre las artes y los medios. Al practicar la hibridación, es decir la mezcla de escritura poética y distintos lenguajes mediáticos, la obra mutante busca crear puentes entre la creación y los dispositivos técnicos actuales. Es patente que el mundo contemporáneo, con sus modos y medios de expresión e información, se expande a través de los medios que se comunican entre sí, se cruzan y pasan de un soporte al otro. La integración de tales herramientas en la obra poética produce un cambio de enfoque: en vez de concentrarse en la posible rivalidad o competencia entre los modos de producción artística, se destaca precisamente el potencial creativo y expresivo del medio para dar forma a una nueva estética, más apropiada a la realidad tecnológica del siglo XXI.
Curaduría sobre autores varios
Sergio Loo
Dianan Garza Islas
José Alfredo Ballesteros López
Ada Nuño
Sol Lewitt
Continuidad del ejercicio planteado previamente.
La idea de lo fragmentario surge en el siglo XIX. Con el advenimiento de las vanguardias lo fragmentario rompe con el naturalismo y se impone siguiendo el ritmo de una sociedad que avanza velozmente. El desarrollo de la técnica, con la fotografía y el cine a la cabeza, impusieron una aceleración virtual que condicionó un nuevo tipo de percepción. Ello fue primero visible en las artes plásticas y en la literatura para extenderse al resto de los procesos discursivos.
Cuando hablamos de fragmentarismo, o de poesía «fragmentada», damos por sentado que existe una poesía «no fragmentada», es decir, que existen ciertas partes que permanecen inconexas hasta que son legitimadas por un orden que les da coherencia como un todo.
Este módulo traza un recorrido alrededor de lo fragmentario y cómo se ha ido adueñando del discurso poético actual.
Curaduría sobre autores varios
Ada Nuño
Enrique Lynch
El ejercicio será planteado durante la sesión.